

































Estude fácil! Tem muito documento disponível na Docsity
Ganhe pontos ajudando outros esrudantes ou compre um plano Premium
Prepare-se para as provas
Estude fácil! Tem muito documento disponível na Docsity
Prepare-se para as provas com trabalhos de outros alunos como você, aqui na Docsity
Os melhores documentos à venda: Trabalhos de alunos formados
Prepare-se com as videoaulas e exercícios resolvidos criados a partir da grade da sua Universidade
Responda perguntas de provas passadas e avalie sua preparação.
Ganhe pontos para baixar
Ganhe pontos ajudando outros esrudantes ou compre um plano Premium
Comunidade
Peça ajuda à comunidade e tire suas dúvidas relacionadas ao estudo
Descubra as melhores universidades em seu país de acordo com os usuários da Docsity
Guias grátis
Baixe gratuitamente nossos guias de estudo, métodos para diminuir a ansiedade, dicas de TCC preparadas pelos professores da Docsity
Los primeros brotes guerrilleros surgieron en el Perú en la primera mitad de los años 1960 , durante el Reformismo Civil Moderado, cuando el Movimiento de Izquierda Revolucionaria (MIR), grupo guerrillero fundado y liderado por Luis de la Puente Uceda, inició sus primeros ataques en contra del Estado peruano.
Tipologia: Esquemas
1 / 41
Esta página não é visível na pré-visualização
Não perca as partes importantes!
Dedicamos este trabajo monográfico, con sincera gratitud, a nuestras familias, quienes han sido nuestro pilar fundamental durante toda nuestra etapa universitaria. Su apoyo constante, comprensión y sacrificios han sido esenciales para llegar hasta aquí. A ellos, nuestro respeto y cariño más profundo. También extendemos esta dedicatoria a nuestros docentes, en especial a quienes nos orientaron durante el desarrollo de esta monografía. Gracias por compartir con nosotros sus conocimientos, por su exigencia académica, y por motivarnos a investigar con responsabilidad y compromiso ético. A nuestros compañeros de aula, que a lo largo de estos ciclos compartieron aprendizajes, experiencias y desafíos. Su colaboración, consejos y compañía fueron parte esencial de nuestro crecimiento académico y personal.
Primeramente, queremos expresar nuestra más profunda gratitud a Dios, fuente de sabiduría, fortaleza y guía en todo momento. A Él encomendamos cada paso de este proceso académico, y a Él debemos la constancia, la paciencia y la claridad mental que nos permitió culminar esta monografía con éxito. Sin su luz en nuestro camino, no habríamos logrado avanzar con firmeza ni mantenernos unidos como equipo ante los desafíos. De igual manera, extendemos nuestro agradecimiento a nuestras familias, quienes han sido nuestro mayor sostén. Gracias por su amor incondicional, por su apoyo constante, por las palabras de aliento en los momentos de cansancio, y por comprender los sacrificios que implican nuestros estudios. Cada logro alcanzado en este proyecto es también suyo, porque sin su compañía silenciosa y su fe en nosotros, no habríamos llegado hasta aquí.
A través de este análisis, se busca no solo ofrecer un panorama detallado sobre el terrorismo en Sudamérica, sino también generar una reflexión crítica sobre las condiciones que lo originan, los riesgos que implica y las respuestas que deben construirse desde un enfoque integral, respetuoso de los derechos fundamentales y comprometido con la paz y la justicia.
1.1. Definición de Terrorismo El concepto de terrorismo es uno de los más debatidos en la teoría política, el derecho internacional y la criminología contemporánea. A pesar de su frecuente uso en el discurso político y mediático, no existe una definición unívoca ni universalmente aceptada. Esta ambigüedad ha sido aprovechada en algunos contextos para criminalizar a opositores políticos o justificar el uso desproporcionado de la fuerza estatal. No obstante, es posible identificar una serie de elementos comunes a las múltiples definiciones propuestas por organismos internacionales, Estados y académicos. El Consejo de Seguridad de las Naciones Unidas, en la Resolución 1566 (2004), define el terrorismo como "actos criminales, incluidos contra civiles, cometidos con la intención de causar la muerte o heridas graves, o tomar rehenes, con el propósito de provocar un estado de terror en la población general o de obligar a un gobierno o a una organización internacional a realizar o abstenerse de realizar un acto". Esta definición pone énfasis en la intención de infundir miedo generalizado como medio para alcanzar objetivos políticos, ideológicos o religiosos. En América Latina, los marcos normativos nacionales han adoptado definiciones diversas del terrorismo, que responden a los contextos particulares de violencia política de cada país. Por ejemplo, en Perú, el artículo 318-A del Código Penal establece que el terrorismo comprende acciones que buscan alterar gravemente el orden público o coaccionar a las autoridades mediante actos violentos. En Colombia, el artículo 343 del Código Penal castiga los actos que causen terror o pánico en la población con fines políticos o ideológicos. A nivel académico, autores como Bruce Hoffman (1998) sostienen que el terrorismo debe entenderse como una estrategia de comunicación violenta utilizada por actores no estatales para influir en el comportamiento político de una audiencia más amplia que la víctima directa. Por su parte, Martha Crenshaw enfatiza el carácter instrumental del terrorismo como herramienta para alcanzar fines políticos cuando otros métodos no han tenido éxito o han sido inaccesibles. 1.2. Tipologías del Terrorismo El fenómeno del terrorismo puede clasificarse en diversas tipologías, de acuerdo con su motivación, estructura organizativa, métodos empleados y tipo de víctimas. Las principales categorías identificadas en el ámbito académico y político son:
Violencia instrumental y simbólica: Los actos terroristas están cuidadosamente diseñados para maximizar su impacto mediático, simbólico y psicológico, más allá del daño físico inmediato. Propaganda y reclutamiento: La difusión de su mensaje es crucial. Los grupos utilizan desde panfletos hasta redes sociales o emisoras clandestinas para adoctrinar y captar nuevos miembros. Financiamiento ilícito: Para sostener su actividad, los grupos recurren al narcotráfico, secuestro, extorsión, minería ilegal, contrabando, entre otros. Uso del terror como método: El miedo generalizado es el principal vehículo para condicionar el accionar del Estado, paralizar a la sociedad o cooptar territorios. 1.4. Terrorismo VS Guerrilla VS Crimen Organizado Uno de los debates más complejos en el estudio del terrorismo en Sudamérica es la distinción entre terrorismo, insurgencia armada y crimen organizado. En muchos casos, los actores violentos comienzan como movimientos político-militares con una retórica revolucionaria, pero terminan insertándose en economías ilícitas, perdiendo progresivamente su contenido ideológico. Este fenómeno de “hibridación” o “criminalización de la insurgencia” es evidente en los remanentes de las FARC y Sendero Luminoso, que hoy operan como estructuras mafiosas con un discurso residual. Las fronteras entre estos fenómenos se difuminan aún más cuando los gobiernos adoptan marcos legales amplios que catalogan como terroristas a grupos que, aunque armados, pueden tener demandas sociales legítimas. Asimismo, el terrorismo de Estado no puede ser excluido del análisis. En contextos dictatoriales, como la Argentina de la Junta Militar (1976–1983), se utilizaron tácticas propias del terrorismo –desapariciones, torturas, ejecuciones extrajudiciales– bajo el amparo del aparato estatal. Esto complejiza la narrativa que suele identificar el terrorismo únicamente con actores no estatales. 1.5. Clasificación Jurídica del Terrorismo en Sudamérica La lucha contra el terrorismo en Sudamérica ha exigido el desarrollo de marcos normativos específicos, que permiten su prevención, persecución y sanción. No obstante, estos marcos difieren significativamente entre países, reflejando sus distintas trayectorias históricas.
En Perú, el terrorismo es tipificado en los artículos 318 y siguientes del Código Penal. Además, se crearon juzgados y tribunales especiales en los años 90 para combatir a Sendero Luminoso y el MRTA, lo cual generó un fuerte debate sobre el debido proceso. Colombia ha desarrollado una normativa compleja que diferencia entre terrorismo, rebelión, sedición y concierto para delinquir. También se han implementado leyes de justicia transicional, como la Ley de Justicia y Paz (2005), para desmovilizar grupos armados. Argentina introdujo en 2007 la Ley 26.268, que tipifica las organizaciones terroristas, y ha firmado tratados internacionales clave. Tras los atentados a la AMIA y la Embajada de Israel, se ha intensificado la legislación sobre financiamiento al terrorismo. Paraguay y Brasil han adoptado definiciones más amplias y recientes, muchas veces en línea con el GAFI (Grupo de Acción Financiera Internacional) y las recomendaciones de la ONU sobre seguridad financiera. Además, todos los países de la región son signatarios de la Convención Interamericana contra el Terrorismo (OEA, 2002), y participan en mecanismos de cooperación internacional como INTERPOL y el Consejo de Seguridad de la ONU. Sin embargo, la implementación real de estas normas varía, y existen denuncias de su uso con fines políticos o represivos, lo que plantea un desafío adicional en el respeto a los derechos humanos.
afectó al sector económico, especialmente en el ámbito de la minería y la agricultura, con numerosos empresarios y campesinos siendo víctimas de extorsión y secuestros. 2.1.2. Movimiento Revolucionario Túpac Amaru (MRTA) El MRTA adoptó una ideología más orientada hacia el nacionalismo socialista, influenciada por el peronismo argentino y las ideas de Che Guevara, pero con un enfoque más pragmático en su lucha. Mientras que Sendero Luminoso aspiraba a una revolución mundial, el MRTA se centró en la revolución nacional y la transformación de las estructuras de poder en el Perú. A lo largo de su historia, el MRTA se centró en la guerrilla urbana, con secuestros de empresarios y diplomáticos. Su objetivo era forzar al gobierno a una negociación política mediante el uso de rehenes como moneda de cambio. El ataque más conocido del MRTA fue la toma de la residencia del embajador japonés en Lima (1996), que involucró la retención de más de 70 personas durante 126 días. Este episodio mostró la capacidad operativa del grupo, pero también evidenció la complejidad de los intereses internacionales que intervinieron en el conflicto, como Japón, Estados Unidos y otros países de la región. El MRTA fue prácticamente desmantelado en 1997, con la operación Chavín de Huántar, que resultó en la liberación de los rehenes y la eliminación de la mayoría de sus miembros. Sin embargo, el grupo dejó un legado de polarización política y memoria histórica, ya que, a pesar de ser derrotados militarmente, muchos de sus ideales seguían vivos en sectores radicales de la izquierda peruana. 2.2. Colombia 2.2.1. FARC y disidencias Las FARC nacieron como un pequeño grupo de campesinos armados en el sureste colombiano en 1964, pero rápidamente se expandieron debido a la violencia política que vivía el país, especialmente en los años de la Violencia (1948-1958). Influenciadas por el marxismo-leninismo, las FARC se establecieron como un grupo guerrillero que buscaba reemplazar el sistema político colombiano por un régimen socialista, con la idea de liberar al pueblo de lo que consideraban un régimen oligárquico y corrupto.
Durante las décadas de 1980 y 1990, las FARC se involucraron en el narcotráfico de manera cada vez más explícita. Controlaron extensas zonas de cultivo de coca en la Amazonía y los llanos del Caquetá, y su participación en el tráfico de cocaína les permitió financiar sus operaciones militares, comprar armamento y establecer una red de apoyo en diversos países de América Latina. Este involucramiento en el narcotráfico también los vinculó con otros grupos armados y organizaciones criminales, como el Cartel de Medellín y el Cartel de Cali. El acuerdo de paz de 2016 con el gobierno de Juan Manuel Santos marcó el fin de más de 50 años de conflicto armado, con la desmovilización de más de 7,000 combatientes. Sin embargo, la implementación del acuerdo ha sido problemática, con disidencias de las FARC, como la Segunda Marquetalia, continuando sus actividades armadas en áreas rurales del país. El conflicto con las FARC tuvo un impacto devastador en la sociedad colombiana. Más de 220,000 personas murieron en el conflicto, y más de 8 millones fueron desplazadas de sus hogares. La violencia del grupo también involucró secuestrados, atentados con bombas y desapariciones forzadas. El legado del conflicto sigue siendo un tema central en la política colombiana, y las reconciliaciones y las memorias continúan siendo un reto para la sociedad. 2.2.2. Ejército de Liberación Nacional (ELN) El ELN fue fundado en 1964 por un grupo de revolucionarios de izquierda radical, entre ellos Carlos Castaño y Manuel Pérez, que se inspiraron tanto en la teología de la liberación de la Iglesia Católica como en la lucha armada de Cuba y Vietnam. Desde sus orígenes, el ELN adoptó una postura antiimperialista, centrándose especialmente en la lucha contra las multinacionales que operaban en Colombia, en particular las compañías petroleras. El ELN ha sido responsable de numerosos secuestrados, especialmente en las zonas petroleras de Colombia. A través de estos secuestros, el grupo no solo buscaba financiarse, sino también generar un mensaje político sobre la explotación de los recursos naturales y la violencia institucional en Colombia. Aunque el ELN nunca tuvo el nivel de influencia que las FARC alcanzaron, sus tácticas de terrorismo urbano y sus operaciones en las zonas rurales han causado una gran cantidad de víctimas.
La violenta respuesta estatal —especialmente durante la dictadura militar iniciada en 1976— provocó su desarticulación casi total hacia 1977. Aunque sus integrantes actuaban bajo la lógica de una “guerra revolucionaria”, hoy el ERP es considerado un grupo terrorista por su uso sistemático de la violencia con fines políticos. Su accionar y el de otros grupos armados contribuyeron a justificar la represión ilegal del Estado, cuyo saldo fue mucho más alto en términos de violaciones a los derechos humanos. El ERP forma parte del debate histórico argentino, entre quienes lo ven como expresión de lucha contra la injusticia y quienes lo condenan por sus métodos violentos. 2.4. Paraguay 2.4.1. Ejército Del Pueblo Paraguayo (Epp) El Ejército del Pueblo Paraguayo (EPP) es un grupo guerrillero de inspiración marxista- leninista que opera principalmente en el norte del país, especialmente en los departamentos de Concepción, San Pedro y Amambay. Se formó en la década del 2000 como una escisión del Partido Patria Libre, y su objetivo declarado es derrocar el sistema capitalista en Paraguay, establecer una revolución agraria y construir una sociedad socialista. El EPP es conocido por el uso de tácticas como: Secuestros extorsivos, especialmente de hacendados y empresarios (ej. el caso de Cecilia Cubas, hija del expresidente Raúl Cubas). Ataques armados a puestos policiales, militares y propiedades rurales. Colocación de explosivos en caminos rurales y carreteras. Extorsión a productores agropecuarios, a quienes exige "impuestos revolucionarios". Estas acciones han generado un clima de inseguridad rural, afectando tanto al aparato productivo como al tejido social del norte paraguayo. Aunque el EPP no tiene vínculos claros con el narcotráfico a gran escala, sí se le ha relacionado con estructuras del crimen organizado y tráfico de armas. Además, existen sospechas de colaboración logística con grupos criminales transfronterizos como el PCC (Primer Comando Capital) en Brasil. El gobierno paraguayo ha creado una Fuerza de Tarea Conjunta (FTC) integrada por policías y militares para combatir al EPP. Sin embargo, las críticas sobre abusos de
derechos humanos, la falta de resultados sostenibles y la persistencia del grupo han generado un intenso debate en la opinión pública paraguaya. 2.5. Brasil 2.5.1. Grupos criminales con características terroristas En Brasil no se han desarrollado organizaciones terroristas clásicas con ideologías revolucionarias de izquierda o derecha como en Perú o Colombia. Sin embargo, algunos grupos criminales armados, como el Primer Comando Capital (PCC) y el Comando Vermelho, han adoptado tácticas de tipo terrorista, con fuerte control territorial y uso de la violencia para generar miedo y controlar zonas urbanas y penitenciarias. Primer Comando Capital (PCC) El PCC, fundado en 1993 en la prisión de Taubaté, en São Paulo, es considerado el grupo criminal más poderoso del país. Aunque su objetivo es principalmente económico (tráfico de drogas, armas, y control del sistema penitenciario), sus acciones incluyen: Ataques armados coordinados contra comisarías, autobuses y estaciones policiales. Amenazas y asesinatos de jueces, fiscales y periodistas. Disturbios carcelarios masivos, utilizados como forma de presión política. Estas acciones, aunque no motivadas ideológicamente, cumplen una función de control territorial y psicológico, propias del terrorismo urbano. Comando Vermelho Con base en Río de Janeiro, este grupo controla vastas zonas de las favelas, utilizando el terror para mantener su dominio sobre la población. Su vínculo con el narcotráfico internacional ha aumentado en los últimos años, estableciendo conexiones con organizaciones de países vecinos como Bolivia y Colombia. Preocupaciones antiterroristas en Brasil Brasil ha enfrentado en la última década presiones internacionales para reforzar sus leyes antiterroristas, especialmente en el contexto de los Juegos Olímpicos de Río
cárteles de la droga y Hezbollah en esta región, lo que refuerza la importancia estratégica de la Triple Frontera para actividades ilícitas y financiamiento del terrorismo. 3.2. Narcotráfico, lavado de dinero y financiamiento terrorista En Sudamérica, el narcotráfico y el lavado de dinero son mecanismos claves para el financiamiento de actividades terroristas donde diversos grupos criminales y terroristas operan con estructuras complejas y transnacionales. De acuerdo a estas conexiones, estos grupos utilizan diversas estrategias para financiar sus operaciones y expandir su influencia como lo es el: Narcotráfico: La producción y distribución de drogas, especialmente cocaína, es una fuente principal de ingresos. Lavado de dinero: Utilizan empresas fachada, inversiones en bienes raíces y otras actividades legales para blanquear las ganancias ilícitas. Financiamiento del terrorismo: Los fondos obtenidos se destinan a la adquisición de armas, pago a combatientes y expansión territorial. Principales Grupos Terroristas y Criminales en Sudamérica
1. Primer Comando da Capital (PCC) – Brasil Origen y expansión: Fundado en 1993 en São Paulo, el PCC se ha convertido en la organización criminal más poderosa de Brasil, con presencia en varios países de Sudamérica, África y Europa. Actividades : Narcotráfico, lavado de dinero, extorsión, tráfico de armas, minería ilegal y terrorismo. Alianzas: Colabora con grupos como Hezbollah en actividades ilícitas, especialmente en la región de la Triple Frontera entre Brasil, Paraguay y Argentina. 2. Tren de Aragua – Venezuela Origen y expansión: Surgido en 2014 en el estado de Aragua, Venezuela, este grupo ha extendido sus operaciones a países como Colombia, Perú, Ecuador, Chile y Estados Unidos. Actividades: Narcotráfico, trata de personas, extorsión, secuestros, minería ilegal y lavado de dinero. Alianzas: Mantiene relaciones con el PCC y otras bandas criminales de la región.
3. Clan del Golfo – Colombia Origen y expansión: También conocido como Autodefensas Gaitanistas de Colombia (AGC), este grupo surgió tras la desmovilización de las Autodefensas Unidas de Colombia (AUC) y opera principalmente en el norte y noroeste del país. Actividades: Narcotráfico, minería ilegal, extorsión, secuestros y asesinatos. Alianzas y rivalidades: Colabora con carteles mexicanos como el de Sinaloa y el Jalisco Nueva Generación, y mantiene enfrentamientos con el ELN y disidencias de las FARC. 4. Disidencias de las FARC – Colombia Origen y expansión : Tras el acuerdo de paz de 2016, varios excombatientes de las FARC no se desmovilizaron y formaron nuevas estructuras armadas que operan en diversas regiones del país. Actividades: Narcotráfico, secuestros, extorsión y ataques terroristas. Ejemplo reciente: En abril de 2025, un atentado con motocicleta bomba en La Plata, Huila, dejó dos muertos y 31 heridos; se sospecha de la participación de la columna Dagoberto Ramos del Estado Mayor Central 5. Hezbollah – Presencia en la Triple Frontera Operaciones: El grupo libanés Hezbollah ha establecido redes de financiamiento y lavado de dinero en la región de la Triple Frontera (Argentina, Brasil y Paraguay), aprovechando las actividades ilícitas locales para financiar sus operaciones en Medio Oriente. El Grupo de Acción Financiera de Latinoamérica (GAFILAT) ha publicado informes que detallan las amenazas regionales en materia de lavado de activos y financiamiento del terrorismo, destacando la necesidad de fortalecer los mecanismos de prevención y control en la región. 3.3. Colaboración entre grupos armados y crimen organizado La frontera entre terrorismo y crimen organizado en Sudamérica se ha vuelto cada vez más difusa, ya que muchos grupos armados ilegales, inicialmente con motivaciones ideológicas