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el olvido de los sueños, Apuntes de Psicoanálisis

apuntes sobre el olvido de los sueños segun sigmund freud

Tipo: Apuntes

2019/2020

Subido el 04/02/2020

julie-padilla
julie-padilla 🇨🇴

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EL OLVIDO DE LOS SUEÑOS
Lo que recordamos del sueño y sobre lo cual ejercemos nuestras artes
interpretativas está, en primer lugar, mutilado por la infidelidad y falsedad de
nuestra memoria, que parece sumamente incapaz de conservar al sueño y quizás ha
perdido justamente el fragmento más significativo de su contenido.
El sueño puede que haya sido tan coherente como lo contamos, y de que en el
intento de reproducirlo lo hayamos llenado con material nuevo, escogido al acaso,
lagunas inexistentes o creadas por el olvido.
desfiguramos el sueño en el intento de reproducirlo; reencontramos en esto lo que
caracterizamos como la elaboración secundaria del sueño por parte de la instancia
del pensamiento normal, que a menudo incurre en un malentendido sobre aquel,
Pero tal desfiguración no es, a su vez, sino un fragmento de la elaboración a que son
sometidos regularmente los pensamientos oníricos a consecuencia de la censura del
sueño..
(En los análisis de sueños con pacientes, suelo someter esta aseveración al siguiente
examen, y nunca falla: Cuando a primera vista el informe de un sueño me parece de
difícil comprensión, ruego al que me lo cuenta que lo repita. Es raro que lo haga con
idénticas palabras. Ahora bien, los lugares en que él modificó la expresión, que me dan a
conocer los puntos débiles del disfraz del sueño, me sirven como a Hagen la señal
bordada en el vestido de Sigfrido.^ Por ahí puede comenzar la interpretación del sueño,
Mi exhortación alertó al informante de que yo tenía el propósito de empeñarme
particularmente en la solución del sueño; y rápidamente protegió, bajo el esfuerzo
{Drang} de la resistencia, los puntos débiles del disfraz del sueño, sustituyendo una
expresión reveladora por otra más remota)x
La duda sobre el reflejo* correcto del sueño o de datos singulares de él no es,
de nuevo, sino un retoño de la censura onírica, de la resistencia a la irrupción de
los pensamientos oníricos en la conciencia.
TODO LO QUE PERTURBA LA PROSECUCION DEL TRABAJO ANALITICO ES UNA RESISTENCIA.
No es raro que en mitad del trabajo interpretativo emerja repentinamente un
fragmento omitido del sueño, al que se define como olvidado hasta ese
momento. Ahora bien, esta parte del sueño arrancada al olvido es en todos los
casos la más importante; lleva por el camino más corto a la solución del sueño y
por eso fue la más sometida a la resistencia.
Además, la interpretación de un sueño no siempre se consuma de un golpe; no es
raro que uno sienta exhausta su capacidad para lograrlo cuando ha seguido un
encadenamiento de ocurrencias y el sueño no le dice nada más por ese día; en tal
caso hará bien en interrumpir y volver sobre el trabajo un día próximo.
Pregunta: pero teniendo en cuenta que el sueño se va olvidando, no seria mas
complicado seguir al otro día?
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EL OLVIDO DE LOS SUEÑOS

 Lo que recordamos del sueño y sobre lo cual ejercemos nuestras artes interpretativas está, en primer lugar, mutilado por la infidelidad y falsedad de nuestra memoria, que parece sumamente incapaz de conservar al sueño y quizás ha perdido justamente el fragmento más significativo de su contenido.  El sueño puede que haya sido tan coherente como lo contamos, y de que en el intento de reproducirlo lo hayamos llenado con material nuevo, escogido al acaso, lagunas inexistentes o creadas por el olvido.  desfiguramos el sueño en el intento de reproducirlo; reencontramos en esto lo que caracterizamos como la elaboración secundaria del sueño por parte de la instancia del pensamiento normal, que a menudo incurre en un malentendido sobre aquel, Pero tal desfiguración no es, a su vez, sino un fragmento de la elaboración a que son sometidos regularmente los pensamientos oníricos a consecuencia de la censura del sueño.. (En los análisis de sueños con pacientes, suelo someter esta aseveración al siguiente examen, y nunca falla: Cuando a primera vista el informe de un sueño me parece de difícil comprensión, ruego al que me lo cuenta que lo repita. Es raro que lo haga con idénticas palabras. Ahora bien, los lugares en que él modificó la expresión, que me dan a conocer los puntos débiles del disfraz del sueño, me sirven como a Hagen la señal bordada en el vestido de Sigfrido.^ Por ahí puede comenzar la interpretación del sueño, Mi exhortación alertó al informante de que yo tenía el propósito de empeñarme particularmente en la solución del sueño; y rápidamente protegió, bajo el esfuerzo {Drang} de la resistencia, los puntos débiles del disfraz del sueño, sustituyendo una expresión reveladora por otra más remota)x  La duda sobre el reflejo* correcto del sueño o de datos singulares de él no es, de nuevo, sino un retoño de la censura onírica, de la resistencia a la irrupción de los pensamientos oníricos en la conciencia. TODO LO QUE PERTURBA LA PROSECUCION DEL TRABAJO ANALITICO ES UNA RESISTENCIA.  No es raro que en mitad del trabajo interpretativo emerja repentinamente un fragmento omitido del sueño, al que se define como olvidado hasta ese momento. Ahora bien, esta parte del sueño arrancada al olvido es en todos los casos la más importante; lleva por el camino más corto a la solución del sueño y por eso fue la más sometida a la resistencia. Además, la interpretación de un sueño no siempre se consuma de un golpe; no es raro que uno sienta exhausta su capacidad para lograrlo cuando ha seguido un encadenamiento de ocurrencias y el sueño no le dice nada más por ese día; en tal caso hará bien en interrumpir y volver sobre el trabajo un día próximo. Pregunta: pero teniendo en cuenta que el sueño se va olvidando, no seria mas complicado seguir al otro día?

 procedimiento para la interpretación de los sueños es idéntico al que se sigue en la resolución de los síntomas histéricos, en cuyo caso su corrección es certificada por la emergencia y la desaparición de los síntomas en su localización  ombligo del sueño : lugar de donde emerge el sueño, lo que se queda sin interpretar. ACERCA DEL CUMPLIMIENTO DEL DESEO: se separan los sueños en dos grupos: Hallamos sueños que se presentaban de manera franca como cumplimiento de deseo—normalmente se da en los niños ya que estos no tienen censura ---y logran su meta, y otros en que este era irreconocible y a menudo ocultado por todos los medios, En estos últimos discernimos las operaciones de la censura oníricase presenta normalmente en los adultos, ya que en ellos se presentan mecanismos de defensa, de lo prohibido, tienen prejuicios morales, que en el sueño querra satisfacer Hallo tres posibilidades para la génesis de un deseo :

  1. Puede haberse excitado durante el día sin obtener satisfacción a causa de condiciones exteriores; así queda pendiente para la noche un deseo admitido y no tramitado.
  2. Puede haber emergido de día, pero topándose con una desestimación; queda pendiente, pues, un deseo no tramitado pero que fue sofocado.
  3. Puede carecer de relación con la vida diurna y contarse entre aquellos deseos que sólo de noche se ponen en movimiento en nosotros desde lo sofocado
  4. como cuarta fuente del deseo del sueño las mociones de deseo actuales, que se despiertan durante la noche (v. gr., por el estímulo de la sed o la necesidad sexual). Después, nos parece probable que la procedencia del deseo onírico en nada modifique su capacidad para provocar un sueño localizamos un deseo de la primera clase en el sistema Prcc; del deseo de la segunda clase suponemos que fue esforzado hacia atrás del sistema Prcc al Icc, y si es que se ha conservado, lo ha hecho sólo ahí; y de la moción de deseo de la tercera clase creemos que es de todo punto incapaz de trasponer el sistema del Icc  El sueño no se engendraría si el deseo preconciente no supiese ganarse un refuerzo de otra parte. ¿De dónde? Del inconciente. Me imagino las cosas así: el deseo conciente sólo deviene excitador de un sueño si logra despertar otro deseo paralelo, inconciente, mediante el cual se refuerza. A estos deseos inconcientes los considero, de acuerdo con las indicaciones que he recogido en el psicoanálisis de las neurosis, como siempre alertas, dispuestos en todo momento a procurarse expresión cuando se les ofrece la oportunidad de aliarse con una moción de lo conciente y de trasferir su mayor intensidad a la menor intensidad de esta.