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Apunte sobre qué son las aguas del Silala, cuáles son sus principales características y consecuencias.
Tipo: Apuntes
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El agua es uno de los cuerpos más complejos desde el punto de vista físico químico, ya que es muy complicado obtenerlo en estado puro y además es el que presenta un mayor número de anomalías en sus constantes físicas.
El agua es la fuente misma de toda la vida, sin agua no hay vida; ya que es la bebida elemental y fuente de energía, además de ser una necesidad para el desarrollo de la agricultura y la industria.
El 71% de la superficie de nuestro planeta está cubierto por océanos; existen aproximadamente 1,4 millones de kilómetros cúbicos de agua de los cuales el 97,4% es agua de mar o salobre. De la cantidad restante aproximadamente el 75% está encerrado en casquetes polares y glaciares. El agua dulce representa aproximadamente 9000 kilómetros cúbicos al año, cantidad suficiente para cubrir las necesidades fundamentales de toda la población humana pero lamentablemente la distribución de este recurso no es uniforme ya que existen regiones áridas y semi áridas en las cuales existe un marcado déficit de este elemento.
A través del tiempo se ha percibido una creciente escasez de este elemento debido al crecimiento poblacional y a la contaminación ambiental, según datos del Banco Mundial, aproximadamente 1000 millones de personas en el mundo no tienen ningún acceso a fuentes de agua aptas para consumo y aproximadamente 1700 millones de habitantes no tienen saneamiento adecuado. La solución a esos problemas en estos tiempos exige inversiones 5 veces mayores a las actuales debido a los altos costos de regeneración y retratamiento de las aguas^1.
En un futuro cercano, la escasez de agua podría ser la causa de nuevos conflictos internacionales, basados en experiencias de países del Medio Oriente en los cuales se tienen grandes cantidades de recursos energéticos (petróleo) y bajas cantidades de recursos hídricos (agua).
Uno de los problemas mas graves que enfrenta el país es la disponibilidad de aguas y la contaminación de las disponibles para consumo. A raíz de esta situación se estima que el 80% de las enfermedades en Bolivia tienen origen en el consumo de aguas contaminadas. El elevado índice de mortalidad infantil es el resultado del consumo de aguas insalubres.
En los próximos años, el país deberá encarar una serie de rigurosos proyectos para abastecer de agua a las poblaciones, a la agricultura y a las industrias nacionales, para esto deberá tener la capacidad técnica y económica de explotar todas sus reservas, fijando siempre la viabilidad operativa de los mismos.
(^1) Informe Anual OMS, 1998
Bolivia no está libre de involucrarse en problemas binacionales a causa del agua, debido a que el país posee elevadas cordilleras de las cuales se generan los causes fluviales, convirtiéndose estas en áreas estratégicas y de gran importancia geopolítica.
En el caso particular con Chile, existe un riesgo de conflicto por el aprovechamiento de las aguas del Silala, cuyo origen y control está en manos de Bolivia pero los mayores intereses de uso residen en el país chileno, que en determinado momento podría ver que sus intereses estén siendo afectados y tomar actitudes de fuerza destinadas a lograr el control total de esta agua, tanto en su origen como en su uso final.
Chile necesita urgentemente mantener abastecidas de agua todas sus ciudades ubicadas en el desierto de atacama y tiene focalizada su atención en el aprovechamiento de las aguas del Silala ya que esta tiene la característica de ser limpia y potable, por lo que prácticamente no precisa tratamientos químicos ni microbiológicos importantes.
En la actualidad las aguas del Silala no tienen un costo establecido ni un caudal de uso determinado y que estén bajo control de las autoridades departamentales del departamento de Potosí, lo que de hecho constituye una pérdida de divisas importante para la zona y para la población del lugar, cuyas condiciones de pobreza son comunes en todo el departamento.
De igual manera, el desarrollo de la región potosina depende mucho de esta agua, como es el caso de las Pampas de Agua de Perdiz, que está ubicada muy cerca de las aguas del Silala con cuya vertiente podría desarrollar importantes proyectos agrícolas, ganaderos, turísticos y eventualmente algunas industrias regionales.
En Bolivia hay tres cuencas o vertientes hidrográficas bien definidas, la Cuenca Amazónica que es la mas importante y ocupa casi el 50% del territorio; la Cuenca del Plata y la Cuenca Altiplánica o de los Lagos.
La Cuenca Amazónica va desde la Cordillera Real a todo el oriente, siendo sus ríos principales el Madre de Dios, Beni, Mamoré y el Itenez; todos ellos desembocan en el Madera que es uno de los afluentes del Amazonas.
La Cuenca del Plata ocupa el sureste del país desde el departamento de Chuquisaca siendo sus ríos principales el Paraguay y el Pilcomayo.
La Cuenca Altiplánica es una cuenca cerrada que forma un eje entre los dos grandes lagos del país; el Titicaca y el Poopó, el río que los une es el Desaguadero. Forman parte de este sector los grandes salares, el de Uyuni y el de Coipasa.
Históricamente la política Chilena ha estado dirigida a aprovecharse de los recursos naturales y geográficos de Bolivia. Como ejemplos tenemos la usurpación del Litoral Boliviano en un conflicto originado por la ambición Chilena de los recursos de Guano y Salitre; el Tratado de Paz de 1904 con claros vicios del derecho internacional; el desvío de las aguas de los ríos Lauca y Mauri, el aprovechamiento de las aguas del Silala y mas actualmente la remoción de hitos
Norte el Cerro Silala Grande y Cerro Negro; al Sureste el Cerro Nacaliri y el Volcán Apagado; Al Suroeste el Cerro Cahuana.
Orografía: Los macizos volcánicos tienen alturas superiores a 5000 msnm, la altitud del terreno donde se encuentra la laguna colorada es 4288 msnm; Las pampas con bofedales, donde se encuentran mas de 90 manantiales o vertientes están dispuestos en terrenos de poca pendiente con alturas de entre 4300 y 4800 msnm.
Precipitación anual: El promedio anual es de 40 mm/año.
Temperatura: Menor a 5ºC
Evotranspiración: 100 a 200 mm
Fisiografía: Existen fuentes termales con presencia de fuentes geotérmicas cerca de laguna colorada. La región es inhóspita. La diferencia de temperatura entre el día y la noche es de 50ºC.
Hidrografía: No existen trazos de cursos de aguas naturales, es decir no existe un cauce natural de un río nacional o internacional. Estudios mas rigurosas han demostrado que no existe la posibilidad de formación de un curso de agua permanente o río.
Simplemente existen áreas húmedas o bofedales aislados unos de otros de las cuales brotan aguas subterráneas conocidas como vertientes.
El afloramiento de las aguas subterráneas (manantiales) forman los vertientes con un caudal de 5 a 9 litros/seg.; entre estos bofedales no hay intercomunicación debido a la diferencia de nivel y a la baja pendiente del terreno que impide el escurrimiento de los pocos litros de agua que emanan del subsuelo que por otro lado debido a su permeabilidad impide la formación de un riachuelo.
En los Anexos “A” y “B” se observa la relación de acequias o canales de recolección de aguas construidos por la compañía Inglesa “The Antofagasta and Bolivian Railway Company Limited” para transportar las aguas recolectas hasta el territorio chileno.
Para la recolección de las aguas se tienen numerosas bocatomas y acequias; 27 Km. de canales revestidos con mampostería; 2,5 Km. de canales revestidos con mampostería y hormigón; 17 Km. tubería de 25 cm. de diámetro y 46 Km. de tendido de tubería de 30 cm. de diámetro.
El agua es tratada en el cañadón para posteriormente ser transportada desde un pequeño estanque por medio de un canal y dos cañerías (una enterrada y la otra al aire libre) para luego desembocar en un estanque ubicado a 20 metros en territorio chileno donde todo el agua es concentrada y tratada.
Mas abajo, a 8 kilómetros de la frontera existe una represa en la cual los chilenos cuidan y almacenan las aguas del Silala para luego ser llevada mediante cañerías a las ciudades de Calama, Chuquicamata, Antofogasta, Mejillones, Tocopilla, Cobija y otras poblaciones menores del norte chileno en la región del desierto de Atacama.
El 14 de febrero de 1879 el Ejercito chileno invadió Antofagasta y se dio inicio a la guerra del Pacífico que enfrentó a los países de Perú y Bolivia que firmaron una alianza para enfrentarse a Chile.
Como resultado de la guerra se tuvieron desmembraciones territoriales de parte de Perú y Bolivia, que fue el mas afectado ya que perdió su zona Litoral y por consiguiente su espacio de salida al mar.
El pacto de tregua entre Bolivia y Chile fue firmado el 4 de Abril de 1884 y a partir de esta fecha se crearon una serie de comisiones bilaterales destinadas a determinar los nuevos límites y los alcances de las compensaciones. En el tiempo estos acuerdos fueron sistemáticamente diferidos, modificados y replanteados por la hábil diplomacia chilena, contando además con la inefectiva y reactiva diplomacia boliviana que en muchas situaciones por falta de una adecuada coordinación a nivel de gobierno no consiguieron obtener mayores compensaciones y beneficios de parte de Chile, consiguientemente la mayoría de los tratados resultaron enteramente favorable a los invasores.
Durante la fase de demarcación final de límites participaron comisionados ingleses, bolivianos y chilenos, y ya entonces se pudo percibir la importancia que iba a tener el agua en la economía y el desarrollo del norte chileno. En uno de los recorridos al sector del Silala ya se realizaron algunas excavaciones que permitieron identificar la riqueza acuífera del sector.
Las locomotoras de la época utilizaban grandes cantidades de vapor para generar la energía la fuerza de locomoción, en ese entonces las aguas del río San Pedro estaban quedando insuficientes para abastecer semejante cantidad de energía requerida.
En 1900 el Ingles Josias Harding emite un informe a la compañía inglesa The Antofagasta and Bolivian Railway Company Limited, en sentido que en el sector boliviano del Silala existían reservas de agua cuya cantidad era suficiente para abastecer por completo las necesidades de la empresa. Este informe dio lugar al inicio de los estudios de explotación, uso, aprovechamiento de las aguas en el sector de la estación ferroviaria de San Pedro.
En 1908 la compañía inglesa The Antofagasta and Bolivian Railway Company Limited se adjudicó el uso, aprovechamiento y explotación de las aguas del Silala. Esta adjudicación estuvo basada en la ley del 28 de Noviembre de 1906 en la cual se elevó a rango de ley el “Reglamento de Aguas” promulgado por decreto del 8 de septiembre de 1879.
El artículo 204 de esta ley señala que “En concesión del aprovechamiento de aguas públicas se observará el siguiente orden de preferencia”:
1. Abastecimiento de Poblaciones 2. Abastecimiento de Ferrocarriles 3. Riegos 4. Canales de Navegación 5. Molinos y otras fábricas; Barcas de paso y puentes flotantes
Ese mismo año el Cónsul Boliviano en Chile confirma la distorsión en el uso de las aguas, resaltando además el importante volumen de reservas de la región.
Año 1962 Una comisión oficial del gobierno Boliviano presidida por el Ing. Augusto Valdivia Altamirano viaja a la región del silala y comprueba que las aguas de los manantiales y vertientes han sido colectadas mediante la construcción de canales. En esta oportunidad el Ing. Valdivia indica que se trata de un río por basarse en un mapa del IGM en el cual se lee “Río Silala” canalizado.
Año 1965 Se realiza una nueva inspección a la región a cargo de funcionarios y técnicos de la Dirección General de Límites quienes en su recorrido confunden las aguas con un río de curso sucesivo (al ver correr las aguas por medio de un canal colector general), estableciendo también el volumen de agua traspasada a territorio chileno (0,45 Mt3/seg).
Año 1997 El periódico “Presencia” publica un artículo del Ing. Antonio Bazoberry titulado “En la región del Silala no hay ningún río”, lo cual causa una sorpresa general en todos los que sostenían que existía un desvío de las Aguas del “río” Silala.
Año 1997 La Cancillería contrata a la firma consultora Gómez García, en cuyo informe final se establece que no se ha encontrado ningún río en la zona, sino mas bien se tienen construcciones y obras civiles para la recolección de sus aguas y para su transporte a territorio chileno.
El tema de las aguas del Silala comenzó a tomar un nuevo curso luego de una denuncia realizada en 1996 obligaba al estado boliviano a prestar atención a un asunto olvidado durante 90 años.
Mediante Decreto Supremo Nº 24660 del 20 de Junio de 1997, se estableció la revocación del uso y aprovechamiento de las aguas manantiales del Silala que fuese otorgada mediante escritura pública Nº 48 del 23 de septiembre de 1908, quedando los señores ministros de Relaciones Exteriores, de la Presidencia y de Gobierno, encargados de la ejecución y cumplimiento de este Decreto Supremo.
La posición chilena es que las aguas del silala provienen de un río de curso internacional, cuyo nombre aparece inclusive en el tratado de paz y amistad firmado en 1904 y que sería un error de parte de Bolivia el tocar esas aguas o licitarlas, pues significaría afectar el normal aprovisionamiento de agua en las regiones del norte chileno.
En concepto de Chile, la ley internacional establece que un curso natural de agua que baña a dos países no puede ser dispuesto de forma unilateral por uno de ellos y que este sería un asunto que debería ser tocado en tribunales internacionales.
La concesión inicial de 1908 establecía la utilización de las aguas del Silala por parte de la empresa The Antofagasta and Bolivian Railway Company, por medio de la cual se autorizaba a canalizar sus vertientes a objeto de transportarlas a
(^4) Extractado de reportes de Periódicos, Semanarios y Revistas y recopilación de información a
través del CEDIB (Centro de Documentación e Información Bolivia)
territorio chileno para ser utilizadas en el uso de las locomotoras a vapor del ferrocarril Antofagasta-La Paz.
Bolivia jamás obtuvo un retorno por dichos contratos, que tampoco establecían los montos que debían ser pagados y luego que las locomotoras a vapor dejaron de funcionar, las aguas fueron utilizadas para abastecer el consumo privado de la ciudad de Antofagasta y otras ciudades norteñas.
El primer trimestre de 1999 se inició una serie de análisis y consideraciones sobre el uso y explotación que debería darse a las aguas del Silala, sin embargo no se tenía una estrategia clara al respecto.
En marzo de 1999 tanto el Canciller Javier Murillo y el Ministro de la presidencia Carlos Iturralde confirmaron que Bolivia no tenía una estrategia definida sobre las aguas del Silala y que se estaba arrastrando un problema de mas de 90 años de duración durante los cuales existió un total desinterés de parte de las autoridades bolivianas para lograr una solución a este problema. Se estima que Chile se beneficia con mas 6,3 millones de metros cúbicos de agua al año y que Bolivia deja de percibir mas de 2 millones de dolares anuales por concepto de utilización de las aguas.
En Septiembre de 1999 el Vicecanciller de Relaciones Exteriores de Bolivia, Fernando Messmer reiteraba que el Silala no es un río Internacional, tal como lo afirmaban las autoridades chilenas, siendo mas bien un manantial que nace y está en Bolivia, sin embargo ninguno de los países terminó cediendo posiciones. La posición Boliviana está sustentada por datos históricos, de justicia y derecho internacional.
La mayoría de las autoridades bolivianas sostienen que el problema es un asunto centenario, por lo tanto no es posible exigir soluciones inmediatas; el tema de las aguas del Silala ha comprometido a muchos gobiernos y muchas gestiones de cancillería y los temas de política internacional deben ser tratados con gran ponderación y no con apresuramiento o intereses que posibiliten salir a la palestra política.
En Agosto de 1999 se promulgó el Decreto Supremo 25500 que encomendaba a la Superintendencia de Aguas a licitar las aguas del Tunari, destinada solamente a empresas nacionales.
El 5 de Septiembre de 1999 fue aprobado el Decreto Supremo 25500 que autorizaba a la Superintendencia de Aguas a realizar la licitación pública nacional para la utilización de las vertientes del Silala para fines de comercialización y/o exportación. Por la ubicación de los manantiales, esta licitación estaría ajustada al artículo 25 de la Constitución Política del Estado que señala :” Dentro de los 50 Km. de las fronteras, los extranjeros no pueden adquirir ni poseer, por ningún título, suelo ni subsuelo, directa o indirectamente, individualmente o en sociedad, bajo pena de perder, en beneficio del estado, la propiedad adquirida, excepto en caso de necesidad nacional declarada por el estado”
Los ingresos estarían destinados en su totalidad a favorecer el desarrollo socio- económico del departamento de Potosí.
El 10 de Septiembre de 1999 se realizó la convocatoria y la venta de pliegos de especificación para la licitación de las aguas de las vertientes del Silala. Este pliego constó de 8 capítulos y 4 anexos, siendo la concesión de las aguas basadas en el proyecto SIRESE (Ley 1600 del 28 de Octubre de 1994).
Valdez manifestaba que su país recurriría inmediatamente a un tribunal internacional de mantenerse la controversia que vulnera los derechos de concesión de las aguas suscrito en 1908.
A criterio del experto Antonio Bazoberry, consultor en asuntos internacionales, Bolivia no debería ingresar en un juicio internacional debido a que sería prestarse al juego chileno en un conflicto de muchos años, del que no saldría nada claro, mientras que Chile seguiría usufructuando las aguas.
Entre todas las empresas interesadas solo DUCTEC y Aguas del Illimani confirmaron su voluntad de continuar en la licitación; habiendo existido una serie de observaciones de parte de sectores políticos y cívicos que refutaban el curso de la licitación debido a que el proceso había pasado por alto las normas legales de adjudicación considerando además que ninguna de las empresas había realizado una oferta mayor a la exigida por la Superintendencia de Aguas que consistía en 1,2 millones de dolares anuales. Ambas propuestas fueron analizadas en detalle, DUCTEC ofertó 46,8 millones de dolares por 40 años de concesión, mientras que Aguas del Illimani ofertó simplemente 6,6 millones de dolares por el mismo tiempo de adjudicación.
El 19 de marzo del 2000 se suscribió el acuerdo definitivo con la empresa DUCTEC (Resolución Nº SSSB15/2000 de la Superintendencia de Saneamiento Básico), acordándose que todos los recursos económicos obtenidos estarían íntegramente dirigidos al desarrollo de la provincia Sur Lipez en Potosí. A los pocos días la empresa adjudicada advirtió sobre el riesgo de que Chile no quiera comprar las mencionadas aguas movidos por una interferencia del gobierno chileno debido principalmente a las diferencias históricas que dividen a Bolivia y Chile.
Según informes oficiales, Chile dio inicio a un proyecto de desanilización de las aguas marinas para poder de esta forma prescindir de las aguas del Silala, pese a que en la fase previa de la adjudicación se había observado mucho interés de las empresas privadas del norte chileno pero ahora se observaba una interferencia de parte del gobierno de Chile.
Varias empresas multinacionales que operan con la explotación de minas de cobre en el norte chileno iniciaron un proyecto destinado a la construcción de plantas desanilizadoras del agua del mar debido, a que desean evitar el riesgo político y la falta de interés del gobierno boliviano por vender el recurso a un precio razonable. Este proyecto está favorecido por la sobreoferta de energía eléctrica en el norte chileno proveniente de plantas termoeléctricas que utilizan gas natural argentino y que facilitan la construcción de las plantas desanilizadoras.
Paralelamente a la adjudicación, se estableció una comisión para trabajar en el calculo científico y jurídico del cobro por la utilización de las aguas por parte de la empresa anglo-chilena; este “Cobro Histórico” estaría a cargo de una comisión interministerial que fue conformada por el presidente de la república Gral. Hugo Banzer Suárez y que quedo a cargo del Ministro de Justicia Juan Antonio Chain. El trabajo de la comisión está orientado a la ejecución de un estudio jurídico internacional de forma de poder presentar un proyecto de reclamo.
A disposición de la comisión están los órganos técnicos como ser la Superintendencia de Aguas; La Superintendencia de Minería y el Instituto Geográfico Militar que son los encargados de dar los datos elementos técnicos del proceso que deberán establecer las fechas desde las cuales la empresa Anglo- Chilena comenzó a utilizar indebidamente las aguas del Silala teniendo en cuenta que en 1908 se concedió el uso limitado de esa vertiente. Desde el momento que
las locomotoras dejaron de utilizar el agua de las vertientes, se puede establecer un plazo para verificar el porque del uso de las aguas para otros fines. También se establecerá un calculo técnico sobre el precio del agua en los años en que sucedió tal uso indebido.
El 20 de Abril del 2000, el superintendente de Aguas Luis Uzín anunciaba oficialmente la suscripción del contrato para la explotación de las vertientes del Silala con la empresa DUCTEC S.R.L., por este concepto el departamento de Potosí pasará a recibir 1,9 millones de dólares anuales durante los próximos 40 años, montos que estarán destinados íntegramente al desarrollo regional de uno de los departamentos mas pobres de Bolivia. Con la adjudicación de esos manantiales, la Superintendencia de Aguas da por concluido su trabajo en el mencionado tema.
El 27 de Abril del 2000, Chile anunciaba oficialmente su desconocimiento al contrato de concesión de las aguas del Silala, por entender que el mencionado recurso hídrico debería ser compartido por ambas naciones, en una declaración oficial del Ministerio de Relaciones Exteriores se manifiesta que el contrato desconoce los derechos de Chile sobre las aguas del Silala y por ese motivo cualquier contrato afecta el derecho de su país. La posición chilena fue expresada en notas dirigidas al gobierno boliviano en fechas 20 de mayo, 15 de septiembre, 14 de octubre, 3 de diciembre de 1999 y es la misma posición que se mantiene ahora.
A raíz de este problema se emitió oficialmente una invitación al gobierno boliviano para entablar un dialogo. El Presidente Chileno Ricardo Lagos expresó que cree firmemente en la posibilidad de reanudar relaciones diplomáticas con Bolivia antes de la culminación de su periodo constitucional el año 2006. El gobierno del Chile analizará el tema de las relaciones diplomáticas con Bolivia en el marco del consejo asesor de política exterior, que es un organismo integrado por ex cancilleres, ex embajadores, académicos y expertos en el área.
La ministra chilena de Relaciones Exteriores Soledad Alvear manifestaba que las discrepancias con Bolivia significaban una dificultad importante para el dialogo que su país pretende impulsar con Bolivia.
Como respuesta el 28 de Abril, el Canciller boliviano Javier Murillo rechazaba las objeciones de Chile al contrato del Silala y manifestaba su pleno respaldo al superintendente Luis Uzin en su defensa del derecho boliviano a explotar sus aguas por encima de cualquier reclamo chileno, ya que la concesión de las aguas a la empresa The Antofagasta Chile and Bolivian Railway Ltd. Fue revocada el 15 de mayo de 1997 y se dio paso a la última licitación ganada por DUCTEC.
Ambos gobiernos expresan sus deseos de que las relaciones binacionales no se vean afectadas por estos sucesos tomando en cuenta las agendas de dialogo que existen entre ambos países.
En toda su historia republicana, Bolivia ha demostrado siempre poco interés en la importancia y en la protección de sus recursos hídricos, ya que en el tiempo no han existido políticas de estado dirigidas a preservar las aguas de las vertientes, lagos, ríos y cuencas que nacen en los sistemas de las montañas en el territorio boliviano.
(^5) Luis Rudy Molina Gemio; “Defensa Jurídica del Silala”, El Diario, Julio de 1998
El agua es muy importante y vital para la vida de las personas y el desarrollo de los pueblos; antiguamente las guerras se originaban por el dominio del oro, plata y petróleo, se prevé que las próximas guerras ocurrirán por el dominio de las reservas de agua.
Según la definición jurídica, río es toda corriente de agua que desemboca en otro rió o en el mar, siendo nacionales si se encuentran integralmente en el territorio de un solo estado, perteneciendo jurídicamente al mismo, en completa soberanía y propiedad; su uso está restringido por la ley interna del estado y está fuera del derecho internacional.
Los ríos internacionales son aquellos que separan o atraviesan el territorio de uno o mas estados. Las cuencas se definen como el territorio cuyas aguas fluyen todas a un mismo rió, lago o mar. Desde el punto de vista jurídico implica los elementos constituidos por un rió, sus afluentes y las aguas subterráneas del sistema.
Cuando los ríos son considerados internacionales se presentan tres problemas jurídicos que son los referidos a la Soberanía, la Navegación y la Utilización de sus aguas para generar energía, riego y otros usos domésticos e industriales.
Bolivia, por su posición geográfica posee muchas cuencas internacionales, por lo que el manejo jurídico de su explotación debe ser conducido con mucho criterio.
Los Estados que comparten aguas internacionales contiguas tienen entre sí, una dependencia física que implica no ejercer el derecho exclusivo por ningún lado. En la declaración de Asunción (1971) aprobada por los Cancilleres de los países de la Cuenca del Plata se establece que en los ríos internacionales de curso sucesivo, no siendo la soberanía compartida, cada estado puede aprovechar las aguas en razón de sus necesidades siempre y cuando no cause perjuicio sensible al otro estado de la cuenca.
El concepto de perjuicio sensible se centra que los daños producidos por una obra de ingeniería hidráulica sean graves. El derecho prohíbe la modificación del curso del rió, de su caudal, del volumen de aguas o de su calidad en la medida que se cause perjuicio sensible.
En el caso de las aguas del Silala, se ha causado un perjuicio sensible dado que se ha desviado el curso natural de su agua, cual era el de sumergirse en el bofedal creando condiciones de humedad para mantener la flora de la zona. El perjuicio es que ha disminuido considerablemente la flora y la fauna de la zona y no existe agua para implementar proyectos de desarrollo en la zona y llevar adelante asentamientos humanos.
El Silala representa una antigua cuenca hidrográfica de aproximadamente 70 kilómetros cuadrados que se originó hace millones de años debido a las condiciones hidrometerológicas reinantes de las altas precipitaciones y caudales.
La cuenca del silala está ubicada en el extremo noroeste del cantón Quetena en la provincia Sur Lípez del departamento de Potosí. Las
vertientes del silala se encuentran en una hondonada y rodeadas en la parte norte por los cerros de Incalari o del Cajón, en la parte sur con el volcán apagado; por el este con una pequeña colina de cerros que bajan del volcán apagado que se extiende hasta el cerro del Incalari y por el lado oeste rodea el cerrito de silala.
En la región de los Lípez se tiene otros recursos minerales, Energía Geotérmica y es rico en flora, fauna y atractivos turísticos. Para la actividad agrícola se requiere agua de riego que es escasa en la zona. Entre los atractivos turísticos mas importantes se destacan el salar de Uyuni y el Valle de los Cactus.
Existe en la región la reserva nacional de fauna “Eduardo Avaroa” con una superficie de 700,000 hectáreas, caracterizada por la cordillera occidental volcánica donde se observan extensas mesetas y cerros volcánicos.
Existen varios proyectos de ENDE dirigidos al aprovechamiento de la Energía Geotérmica en las regiones de Laguna Colorada, Empexa y Sajama con el propósito de ubicar los sitios para la perforación de los pozos. El potencial probable del campo es de 150 a 180 megavatios de potencia.
En la cuenca del silala existen 14 concesiones mineras pero todavía no existe explotación activa. No existen viviendas ni población estable y pese al alto contenido de humedad, no se observa ningún tipo de cultivos.
En la región de los Lípez existen 4150 habitantes y en la provincia Quijarro (cuya capital es Uyuni) existen aproximadamente 37500 habitantes y constituye el eje central de la actividad económica de la región.
La principal proyección económica de la región está basada en el proyecto geotérmico de la Laguna Colorada de los cuales se pretende obtener Energía, sin embargo, se halla demorado por falta de recursos. Otro proyecto de desarrollo está relacionado con la utilización de los recursos hídricos para proyectos agrícolas, riego y dotación de agua a las poblaciones rurales y obviamente contar con las aguas del silala.
El acceso a la región por vía caminera es posible a través de un camino de tierra desde Uyuni a Laguna Colorada (350 kilómetros) y de este sitio a las vertientes que tienen otros 30 kilómetros.
A partir del tratado de 1904, Chile ha continuado avanzando sobre territorio boliviano, convencidos de que la clase dirigente boliviana no ofrece ninguna resistencia, recorriendo sistemáticamente los hitos fijados hasta apoderarse de la totalidad de los bofedales en las nacientes de los grandes ríos que irrigaban el altiplano occidental: Santos, Lauca, Silala, depredando además los depósitos de azufre ubicados al oriente de la nueva línea de la frontera.
Existen en total 96 hitos que tienen observación de posición de los “Mojones”, con los que Chile ha ganado territorio y recursos naturales de casi imposible recuperación. La oligarquía chilena se ha dado cuenta que pese a la imposición del tratado de 1904, por el que Bolivia se quedó sin
utilizando las aguas sino también venía negociando con ellas, vendiéndolas a la ciudad de Antofagasta y defraudando al estado boliviano que dejaba de percibir mas de 500,000 pesos chilenos de forma mensual.
Una comisión oficial del parlamento boliviano se encargó mas tarde de esclarecer la naturaleza de las aguas, estableciendo que estas no eran parte de un río de curso continuo sino mas bien una cuenca cerrada y por lo tanto por su generación y su recurso que nace y permanece dentro del territorio boliviano debería ser renumerado.
En el supuesto caso de que las aguas de las cuencas del Silala fuesen consideradas en calidad de río internacional de curso sucesivo, el Estado Chileno debería seguir los procedimientos establecidos en el derecho internacional y refrendados en las distintas reuniones de cancilleres del área.
El Senador Guillermo Rosso fue uno de los primeros en plantear un pago como forma de compensación por el uso de las aguas del Silala por parte de Chile, y basándose en formulas técnicas y matemáticas llegó a establecer la suma de 857,352,000 dólares americanos que Chile debe pagar a Bolivia. Este valor total toma en cuenta un interés del 3% anual en un tiempo de 83 años.
La resolución administrativa 71/97 del 14/05/97 resuelve la anulación de la concesión de las aguas del silala y el Poder Ejecutivo eleva a Decreto Supremo la decisión de revocar el acuerdo al tratarse de territorio boliviano sujeto a legislación y soberanía.
Chile se niega a pagar por el usufructo abogando que se trata de un cauce que tiene uso internacional. El Dr. Cusicanqui, experto en derecho Internacional se inclina a favor de una denuncia ante las instancias multilaterales de la OEA.
A Bolivia le corresponde reclamar por la aplicación de normas internacionales por el uso y aprovechamiento de las aguas como fue establecido en la Declaración de Montevideo en 1933 y el Convenio de Buenos Aires de 1997.
A. El jurisconsulto, político Sueco y Profesor Universitario Rudolf Kjellen, considera al Estado como un organismo biológico, un ser vital supraindividual, con vida, conciencia propia, que nace, crece y muere en medio de permanentes luchas y conflictos biológicos. Allí se señala al Estado, dominado por dos influencias principales: El Medio Geográfico y la Raza y por tres influencias secundarias: La Economía, la Sociedad y el Gobierno.
B. La importancia que el agua ha tomado a nivel mundial la convierte en uno de los elementos estratégicos y con mayor trascendencia económica en nuestros días. Para lograr un aprovechamiento común y evitar la disputa entre regiones y países se requieren políticas de cooperación y utilización racionales para evitar focos de tensión que eventualmente puedan conducir a enfrentamientos armados.
C. Los problemas limítrofes y las disputas territoriales entre países vecinos no desaparecerán pese a existir un marco de globalización, integración y acercamiento comercial entre países, por lo cual el Estado Boliviano debe permanecer en posición de apronte ante cualquier intento de violación de la soberanía nacional. Este concepto es particularmente importante si consideramos que para la geopolítica chilena la teoría del Espacio Vital es fundamental y en el tiempo este país ha demostrado que tiene una marcada ambición por poseer las riquezas naturales que posee Bolivia a lo largo de su frontera.
D. En base a la documentación existente, queda demostrado que en el tiempo, el uso de las aguas del Silala, ha sido dirigido para el aprovechamiento de las poblaciones del norte chileno, con lo cual incumple el objetivo inicial acordado en 1908 y por otro lado beneficia económicamente a empresas que lucran con la venta de este recurso sin que el estado boliviano reciba nada a cambio.
E. Las aguas del silala no han sido ni pueden ser consideradas cursos naturales de agua (ríos) debido a que si no existirían las canalizaciones artificiales ejecutadas por empresas chilenas, esta agua se reinsumirían en territorio boliviano; además, el acuerdo de 1908 no hubiese sido realizado de haberse establecido que era un río de aguas internacionales lo cual significaba reconocer la propiedad del estado boliviano sobre la totalidad de las aguas.
F. La geopolítica chilena muestra claramente los fines expansionistas que históricamente practicaron y que aún se manifiestan, amenazando la supervivencia del Estado Boliviano.
G. La Constitución Política del Estado señala que el Estado es dueño y soberano de los recursos naturales que se encuentren dentro del territorio boliviano; por lo tanto la política de comercialización de las aguas del Silala a Chile debe estar enmarcada dentro de las políticas de Estado dirigidas a la reintegración marítima.
H. La licitación de las aguas del Silala no ofreció ningún tipo de garantías a los adjudicatarios debido a que el tema bilateral entre Bolivia y Chile no está resuelto; por lo tanto existe la posibilidad de que ninguna empresa chilena esté dispuesta a comprar el agua ofertada por considerarla aguas internacionales. La empresa DUCTEC SRL tiene como mercado ideal el norte de Chile ya que al ser una zona desértica requiere de agua dulce para el consumo humano, riego y el desarrollo de la minería.
I. Para solucionar el tema de uso, explotación y aprovechamiento actual de las aguas del Silala por parte de Chile se conformó una comisión de alto nivel en la cual intervino de forma directa la propia Cancillería y el Parlamento Nacional con su comisión de Política Internacional a objeto de revisar las leyes vigentes y redefinir una utilización racional que convenga a los intereses bolivianos.
J. Pese a que las aguas del Silala han sido oficialmente adjudicadas a la empresa DUCTEC SRL y se espera el ingreso de recursos que contribuyan a mejorar el nivel de vida de la población de la región, el Estado Boliviano no debe descuidar el pago pendiente de la “Deuda Histórica” ya que este pago constituye un precedente de nuestra soberanía y nuestros derechos internacionales.
K. Chile mantiene su posición de llevar el conflicto del Silala a un “Tribunal Internacional” debido a que considera ilegal la licitación y la explotación de sus aguas por parte de una empresa privada Boliviana, ya que la geopolítica Chilena considera al Silala como un río de curso internacional cuyo aprovechamiento debe ser compartido.
alguna forma la pobreza de la región del conflicto y focalizar los esfuerzos nacionales en lograr un mayor acercamiento con Chile, lograr mayores acuerdos comerciales y buscar mercados de exportación de nuestros productos especialmente al norte chileno para de esta manera procurar equilibrar el déficit comercial crónico que tenemos con Chile y mantener vivos y vigentes nuestros postulados de un retorno soberano al Litoral Boliviano.
A nivel interno se deben establecer y desarrollar Políticas de Estado dirigidas a “ocupar” las fronteras con Chile con masiva presencia civil y militar; para esto se debe invertir en el desarrollo industrial del salitre de Uyuni e impulsar los proyectos geotérmicos de Laguna Colorada, a la par de desarrollar el potencial agrícola de la región dotando de agua potable para consumo y riego de las poblaciones rurales, elevando el nivel de vida de sus habitantes y otorgando confiabilidad e infraestructura para promocionar probables inversiones en el área de turismo andino.
La Cancillería boliviana debe atender el llamado de su par chileno y debe promover reuniones que nos permitan acuerdos satisfactorios en todos los problemas pendientes con ese país, para lo cual el tema del Silala debe dejar de ser un factor de división y convertirse mas bien, en un factor de beneficios económicos para Bolivia, que por ser un país rico en recursos naturales debe preocuparse en sacar el máximo beneficio y el mayor valor agregado posible por toda su riqueza.
A nivel interno, el Estado debe desarrollar una política de integración coherente y pujante para lograr un desarrollo social, económico, político y cultural equitativo para eliminar el estigma de algunos geopolíticos de países vecinos que sostienen que Bolivia “ocupa” pero “No domina” su espacio geográfico y aunque duela admitirlo, este es un razonamiento correcto pero potencialmente peligroso para la Seguridad Nacional.
Preguntas del Trabajo
¿Cuánta importancia le asigna el gobierno a la presencia civil y militar en las fronteras, para evitar que se repitan actos de usurpación y explotación ilícita de nuestros recursos naturales y que en el tiempo pueden ser causa de conflictos internacionales de inciertos resultados?
¿Están consideradas las vertientes del Silala como un factor de desarrollo geoestratégico por parte de Chile?