
6.6 Composición de las heces
A lo largo de un día se excretan de 100 a 150 gramos de materia fecal, de la que entre 30 y 50
gramos son sólidos y de 70 a 100 gramos son de agua. La materia sólida está formada por
residuos de materiales no digeribles (ej.: celulosa), pigmentos y sales biliares, secreciones
intestinales, principalmente mucus, células epiteliales descamadas, bacterias (hasta 1/3 de los
sólidos totales), y materiales inorgánicos: Ca++, fosfatos, etc.
Las heces eliminadas diariamente a través del recto contienen una cantidad de líquido inferior
a los 200 ml. Cantidades superiores determinan la aparición de diarrea, que puede tener
diversos orígenes. El fenómeno puede producirse, por ejemplo, por el uso de laxantes,
capaces de bloquear la actividad de la ATPasa Na/K y la absorción intestinal de sodio. El
cólera o determinadas infecciones bacterianas también pueden originar diarrea al estimular la
secreción de agua y electrolitos por las criptas de Lieberkühn; por este mecanismo pueden
llegar a perderse hasta 5-10 litros de agua cada día, con grave riesgo para la vida.
6.6.1 Flora digestiva
El organismo humano contiene unos 100 billones de bacterias (1014) que conviven de manera
simbiótica con él. Ha de observarse que esta población supone más de 10 veces el número de
células del cuerpo humano. Toda esta batería de microorganismos se distribuye entre 400
especies diferentes, dando idea de la diversidad de este ambiente ecológico.
La mayor parte se localiza en el colon donde se miden concentraciones de 1012/ ml; mientras
que en el duodeno hay 104/ml., cantidad muy inferior, pero que indica la colonización
bacteriana de todo el tubo digestivo.
La denominada flora microbiana del aparato digestivo desarrolla las siguientes funciones:
1. Metabólica. Ya que la hidrólisis de glúcidos (fibra insoluble) y oligofructosacáridos, produce
ácidos grasos de cadena corta como:
Ácido butírico. Tiene un efecto trófico sobre las células epiteliales del colon.
Ácido acético. Utilizado como nutriente por la masa muscular.
Ácido propiónico. Utilizado como nutriente por el hígado.
Además estas bacterias sintetizan vitaminas tales como la biotina, ácido fólico, complejo B y
vitaminas K y E. Añadidamente, el pH que se genera en esta región facilita la absorción de
Ca, Mg y Fe. Y una función muy importante es la degradación del propio moco colónico, que
en ausencia de estas bacterias no es degradado correctamente y causa edemas en esta
región.
2. Efecto barrera frente a patógenos. Por un lado, agotando los recursos nutritivos, de tal
forma que no quedan para otras especies; además controlando el pH del medio
(acidificándolo) que imposibilita la presencia de otros organismos de carácter patógeno. Y, por
último, mediante la liberación de bacteriocinas, que atacan otras bacterias.
3. Desarrollo, potenciación y modulación de la respuesta inmune. El 80% de las células
inmunocompetentes se encuentra en el aparato digestivo, y en él se produce la mayor tasa de
producción de inmunoglobulinas (2-3 g de Ig A). En los primeros momentos de la vida, la
interacción de la flora microbiana con el sistema inmune produce la maduración del mismo.