






Study with the several resources on Docsity
Earn points by helping other students or get them with a premium plan
Prepare for your exams
Study with the several resources on Docsity
Earn points to download
Earn points by helping other students or get them with a premium plan
Community
Ask the community for help and clear up your study doubts
Discover the best universities in your country according to Docsity users
Free resources
Download our free guides on studying techniques, anxiety management strategies, and thesis advice from Docsity tutors
Fácil de entender,explicado paso a paso
Typology: Summaries
1 / 10
This page cannot be seen from the preview
Don't miss anything!
La reacción del suelo (pH) es una de las determinaciones más importantes, ya que es un indicador de múltiples propiedades químicas, físicas y biológicas del suelo que influyen fuertemente en su fertilidad. En general, hay cuatro intervalos de pH que son particularmente informativos: Un pH menor de 4 indica la presencia de ácidos libres comúnmente producto de la oxidación de los sulfuros, un pH debajo de 5.5 sugiere estrechamente la ocurrencia de aluminio intercambiable y/o exceso de manganeso, un pH entre 7.5 a 8.2 señala la posible presencia de CaCO 3 y un pH mayor de 8.2 la posible presencia de elevadas concentraciones de Sodio intercambiable. DISPONIBILIDAD DE NUTRIMENTOS El rango de pH del suelo que de forma general se considera el más adecuado por la razonable disponibilidad que muestran los nutrimentos esenciales para las plantas es aquél que va de 6.0 a 6.5. Sin embargo, otros autores incluso manejan un rango más amplio que va de 5.5 a 7.0. El caso de suelos andosoles es muy particular, ya que a pesar de tener el pH dentro del rango, considerado adecuado, se presentan problemas con altos niveles de aluminio y baja disponibilidad de fósforo En la figura 13 se presenta el diagrama general de disponibilidad nutrimental en función del pH del suelo. El pH, como se mencionó anteriormente, es un indicador de la disponibilidad de los nutrimentos en la solución del suelo. La presencia de iones de aluminio (Al3+, Al(OH2+)), hidrogeno (H+) e hidroxilo (OH-) son determinantes en la solubilidad de los nutrimentos en el suelo como son fosfatos, sulfatos, molibdatos, hierro, manganeso, cobre o zinc. Sin embargo, también pueden ser indicadores de la escasez de las formas disponibles de calcio, magnesio, potasio o sodio en el mismo suelo. Cuando el pH tiene un valor mayor a 6.5 la abundancia de iones OH -^ produce la precipitación de compuestos insolubles de hierro, manganeso, cobre y zinc, que no son asimilados por las raíces de las plantas. En suelos con pH por debajo de 6.5 la presencia de iones de aluminio afecta la solubilidad y disponibilidad de fosfato, sulfato y molibdato. De igual forma, con pH ácido en el suelo se restringe la nitrificación y la descomposición de la materia orgánica. La solubilidad del fosfato también se ve afectada por un pH mayor a 6.5 debido especialmente a la concentración elevada de calcio, con el cual se forman compuestos insolubles como fosfato de calcio. Los suelos de regiones con fuertes precipitaciones tienden a tener valores de pH muy bajos (<5.0) y con bajos niveles de disponibilidad de calcio, magnesio y potasio. Por otra parte, el boro es soluble bajo condiciones ácidas en el suelo, pero ante condiciones de pH mayor a 6.5 su solubilidad se ve comprometida y limitada. Todo lo contrario, sucede con el molibdato (MoO 4 =), el cual es poco disponible en suelos con pH por debajo de 5.5, y conforme incrementa este valor, va aumentando su disponibilidad. Con un pH menor a 5.0, hierro, manganeso, zinc y cobre son altamente solubles y forman compuestos con los fosfatos del suelo, volviéndolos poco disponibles para las plantas.
Figura 13. Rangos de disponibilidad de nutrientes vegetales según el pH del suelo. MANEJO DEL pH EN EL SUELO Suelos cercanos a la neutralidad. Es conveniente que el pH del suelo no sea menor 6.0. Sin embargo, suelos con pH menor a 6.0 pero sin llegar a 5.5 aún se consideran de moderada a ligeramente ácidos y no se considera necesario el encalado. Por otra parte, pH entre 6.5 a 7.5 no presentan problemas generales de manejo, excepto por aquellos que tienen cantidades apreciables de bicarbonato de sodio en la solución del suelo, en cuyo caso pueden presentarse problemas de disponibilidad de hierro. A medida que incrementa el pH, la disponibilidad de zinc, hierro, cobre, y manganeso se reduce. Suelos ácidos. A pesar de que algunos cultivos pueden ver afectado su rendimiento a medida que el pH se reduce por debajo de 6.0, los mayores problemas ocurren cuando el pH desciende por abajo de 5.5 debido a problemas por niveles elevados de aluminio, hierro y manganeso, que resultan tóxicos para las plantas. El grado de tolerancia a altas concentraciones de estos elementos depende de cada cultivo. Otro problema que se presenta en suelos ácidos es la baja disponibilidad de iones fosfato (H 2 PO 4 -^ y HPO 4 =), los cuales representan la forma en que la planta absorbe al fósforo. Los iones fosfatos, antes mencionados, forman compuestos insolubles con hierro y aluminio, reduciendo su presencia en la solución del suelo y provocando deficiencias de
Descomposición de la materia orgánica. Al descomponerse la materia orgánica por la acción de los microorganismos del suelo, se libera dióxido de carbono que se transforma fácilmente en bicarbonato, esta reacción libera hidrógeno que acidifica el suelo. Uso de fertilizantes nitrogenados de reacción ácida. Los fertilizantes nitrogenados que contienen o forman amonio (NH 4 +) incrementan la acidez del suelo. El sulfato de amonio, nitrato de amonio y la urea son los fertilizantes típicos que generan esta reacción. Al aplicar estos fertilizantes al suelo, el amonio (NH 4 +) se transforma en nitrato (NO 3 - ) gracias a la acción biológica y libera hidrógeno que acidifica el suelo. Esta reacción es necesaria y se da de manera natural, ya que la mayor parte del nitrógeno que absorbe la planta es en forma de nitrato. Por cada molécula de NH 4 +^ que se transforma a NO 3 - , se liberan dos moléculas de H+. Aluminio intercambiable. La presencia de aluminio (Al3+) en la solución del suelo induce el desarrollo de la acidez del suelo. El aluminio que se desplaza de las arcillas por otros cationes reacciona con el agua y libera hidrógenos. Este incremento en la acidez promueve la presencia de más aluminio disponible para reaccionar nuevamente. Tan solo una concentración de 2-5 ppm de aluminio en la solución de suelo es tóxica para cultivos sensibles, y más de 5 ppm ya es tóxico para cultivos tolerantes. INTERPRETACION Para interpretar el valor analítico de pH del suelo, se consulta la información del cuadro 10. Cuadro 10. Clasificación de los suelos en función de la acidez medida en una relación suelo:agua (1:2) Fuente: (Castellanos, 2000) Grado de acidez o alcalinidad pH Extremadamente acido <4. Acido 4.6 – 5. Moderadamente acido 5.5 – 6. Neutro 6.5 – 7. Moderadamente alcalino 7.4 – 8. Alcalino 8.2 – 8. Extremadamente alcalino >8. Ejemplo: Suponiendo que el resultado analítico del suelo reportado por el laboratorio es de: pH= 8. La interpretación de dicho resultado según el cuadro 10 es: Interpretación: Alcalino (Posible presencia de elevadas concentraciones de Na+^ intercambiable). RECOMENDACIONES DEL pH DEL SUELO.
Figura. Curva de pH-saturación de bases Ejemplo: Al laboratorio de suelos llegó una muestra de suelo con el fin de determinar los requerimientos de cal. El análisis de dicho suelo arrojó los siguientes resultados: CIC = 24 meq/100 gr de suelo PH inicial = 5. PH deseado (final) = 6. Utilizando la figura de arriba se puede observar que, para un pH de 5.2, corresponde una saturación de bases de 76%, y para el pH deseado de 6.9, el porcentaje de saturación de bases corresponde a un 94%. En consecuencia, el número de miliequivalentes de H
que deben ser reemplazados por Ca++^ y Mg++^ es: % de saturación a pH 6.9 = 94 % de saturación a pH 5.2 = 76 Diferencia = 18% de saturación de bases
Esta diferencia puede convertirse, en términos de meq/100 gr de suelo, a la siguiente forma: 24 meq/100 gr ___________ 100% X ___________ 18% X = 4.32 meq/100 gr de suelo En consecuencia, 4.32 meq/100 gr de suelo pueden convertirse en miliequivalentes de carbonato de calcio. Así: Peso molecular Peso equivalente miliequivalente CaCO 3 100gr 50 gr 0.05 gr Peso equivalente = PM o PA, en g/valencia o capacidad de combinación del compuesto meq = peso equivalente/ 1000 La conversión a gramos se hace como sigue: 1 meq de CaCO 3 _________ 0.05 gr 4.32 meq/100 gr __________ X X = 0.216 gr de CaCO 3 /100 gr de suelo El resultado se convierte en Kg/Ha, si se considera que 1 Ha de terreno, Da= 1.3 gr/cm^3 y profundidad de 0.3 m, tiene un peso de 3,900, 000 Kg/Ha PHa = Area x Densidad aparente x Profundidad = 10, 000 m^2 x 1300 Kg/m^3 x 0.3 m = 3, 900, 000 Kg/Ha 1Kg = 1000 g 0.216 g de CaCO 3 / 100 g de suelo = 2.16 x 10-4^ kg de CaCO 3 / 0.1 Kg de suelo 2.16 x 10
Al aumentar la cantidad de ácido sulfúrico, se incrementa consecuentemente la liberación de sales (Figura 3), lo que afecta la disponibilidad de algunos elementos o solubiliza otros que en exceso (P, Zn, Mn, Ca) provoca efectos antagónicos (Mengel y Kirkby,1987). Aquí te presentamos bioinsumos recomendados para suelos alcalinos: Supermagro: Biofertilizante líquido obtenido por fermentación anaeróbica, mejora la fertilidad del suelo y promueve un ambiente propicio para el desarrollo de las plantas en suelos alcalinos. Té de Composta: Solución biológica derivada de la fermentación aeróbica de composta, melaza y harina de pescado, ideal para enriquecer suelos alcalinos con nutrientes esenciales. Caldo Sulfocálcico: Especialmente útil en suelos alcalinos, ayuda a acidificar el suelo al reaccionar con el carbonato cálcico presente, liberando sulfato y mejorando la disponibilidad de nutrientes.